ECONOMIA
7 de octubre de 2025
Crisis textil en Argentina: cerraron 380 empresas y se perdieron más de 11.500 empleos en un año y medio

La Fundación Pro Tejer reveló un informe alarmante: entre diciembre de 2023 y junio de 2025, la caída del consumo, la apertura importadora y la falta de competitividad provocaron un fuerte derrumbe del sector textil e indumentaria. Pymes y fábricas familiares, las más golpeadas.
La industria textil argentina atraviesa uno de los momentos más difíciles de las últimas décadas. La baja del consumo interno, una moneda que no rinde y la avalancha de importaciones formaron un combo explosivo que golpeó de lleno a la producción nacional y dejó a miles de trabajadores sin empleo.
En medio de este panorama, la Fundación Pro Tejer realizó su encuentro anual en el Teatro Roma de Avellaneda, donde empresarios, gremialistas y funcionarios se reunieron para analizar la situación y presentar un informe con datos contundentes.
Según el relevamiento, entre diciembre de 2023 y junio de 2025 cerraron 380 empresas del rubro y se perdieron 11.500 puestos de trabajo formales. La crisis afectó principalmente a pymes y empresas familiares dedicadas a la confección e indumentaria, que no lograron sostenerse frente a la caída de las ventas y los costos dolarizados.
Producción en baja y fábricas paralizadas
Los números muestran que la producción de textiles y ropa se redujo un 14,5% interanual, mientras que la capacidad instalada de las fábricas se encuentra en mínimos históricos.
Priscila Makari, directora de Pro Tejer, explicó:
“El consumo real no repuntó y los precios locales no pudieron sostener el aumento de los costos en dólares.”
A esto se suma el aumento del 32% en las importaciones de productos textiles durante los primeros ocho meses de 2025, con volúmenes récord de mercadería extranjera a precios irrisorios que desplazan a la producción nacional y fomentan la informalidad laboral.
“Competir sí, pero en igualdad de condiciones”
El presidente de Pro Tejer, Luciano Galfione, fue contundente:
“La industria es el motor del país. Competir nos hace mejores, pero tiene que ser en igualdad de condiciones.”
El dirigente señaló que, mientras países como Estados Unidos y Brasil aplican políticas de “compre nacional” y planes de estímulo a la producción, Argentina va a contramano, con baja de aranceles y eliminación de controles que facilitan la entrada masiva de productos importados.
Impacto laboral y advertencia al futuro
La crisis no solo afecta al sector textil. En general, el empleo privado formal cayó un 2%, y la industria manufacturera perdió 33.400 puestos de trabajo entre fines de 2023 y mediados de 2025.
Dentro del rubro textil, indumentaria y calzado, la pérdida fue de 11.500 empleos, lo que representa un 10% del total del sector.
Galfione recordó que el textil “siempre fue el primero en caer y el primero en levantarse”, pero advirtió que “esta vez el golpe es más fuerte” y que lo que ocurre “anticipa lo que puede pasar con el resto de la industria nacional”.
Una caída más profunda que la del resto de la industria
Desde la Federación de Industrias Textiles Argentinas (FITA), su presidente Luis Tendlarz informó que la actividad del sector cayó un 10,1% interanual en julio, frente al 1,1% del promedio industrial según datos del INDEC.
“El sector textil es clave para el empleo en muchas provincias, y esta situación genera un problema serio para la generación de valor y mano de obra en distintas regiones del país”, señaló Tendlarz.
Un panorama preocupante que, lamentablemente, ya había sido anticipado por las cámaras del sector.